Apenas, con un beso entre miradas....

La suave, romántica y seleccionada música va cerrando la noche. En la pista, apenas pareja de enamorados y otras que intentan enamorar sólo dejándose llevar...
Caras cansadas, algunas conversaciones aburridas para dejar correr los minutos finales de la velada, planes para un divertido domingo de verano, de todo un poco....
Estoy sentado a un costado de la barra, casi pasando inadvertido. Allá, apenas a unos metros, una silueta que llama mi atención...
Juegan las luces de colores a buscarte y pasan ligeras sin pedir permiso para llenarme más aún de curiosidad y misterio...
Luces con un vestido negro que sigue a la perfección las líneas generosas de tu forma; un escote muy bonito y sensual que le da un toque distinguido, unos zapatos en perfecta armonía con tu llamativa belleza singular...
Me miras, te miro, hay un suave beso entre miradas...
La atracción existe, me lo dice tu tímida sonrisa que llega hasta mis ojos. Mi corazón empieza a acelerarse sin sentido, o tal vez sí, algo me ha impactado y me ha dejado hipnotizado...
Dialogas con una grupo de chicas y chicos, seguramente tus amigos, pero cada tanto sonríes y de reojo das la vuelta hacia la barra. No lo puedo evitar, siempre se cruza con la mía, no puedo dejar de mirarte...
Pido dos copas de champagne al camarero, me levanto y voy a tu encuentro. Espero a unos pasos de distancia y espero el momento que se crucen las miradas. Llegas, tu mirada en la mía. Levanto las copas delicadamente para no llamar la atención y te hago una seña acompañada de una sonrisa cómplice...
Desvías la vista y la llevas hacia donde están tus amigos. Regresas la vista y ahora más decidida, te acercas y aceptas mi copa. Brindamos y damos un sorbo, no hay palabras, apenas una sonrisa que habla...
No es la mejor decisión ser tan directo pero no encuentro otra mejor, me dejo llevar por los sentidos. Te invito a bailar una pieza, la música es bien romántica y entra por los oídos y el corazón , bailar pegados de Sergio Dalma...

Aceptas. Nos susurramos cosas en el oído y nos gusta, notamos que algo fuerte nos ha unido desde un primer momento...
Sonreímos y mis manos aprietan tu cuerpo contra el mío cada tanto como queriéndote abrazar, no te resistes, algo fuerte está naciendo....
Me gustas y mucho, te lo hago saber y sonríes nuevamente. Intentas decirme algo en el oído al mismo tiempo que doy vuelta la cara, nos miramos distinto. Mis labios buscan los tuyos, mi boca busca la tuya. Me abrazas fuerte del cuello, lo mismo hago sobre tu cintura. Sin querer sale un te amo, se detiene la música y seguimos bailando, decidimos no separarnos de por vida...........

OTOÑO

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